jueves, 25 de junio de 2009

Desapego

¿Hasta dónde debemos mantener la mente y la voluntad firmes en lograr algo y hasta dónde debemos ser flexibles? "El mundo está lleno de sufrimientos y la raíz del sufrimiento es el apego", decía Siddhārtha Gautama.

¿Qué es el apego? Se define como un estado emocional de vinculación compulsiva a una cosa o persona determinada, originado por la creencia de que sin esa cosa o persona, no es posible ser feliz.

Tu mente dice: "no puedes ser feliz si no tienes tal o cual cosa, o si tal persona no está contigo. No puedes ser feliz si tal persona no te ama. No puedes ser feliz si no tienes un trabajo seguro. No puedes ser feliz si no das seguridad a tu futuro. No puedes ser feliz si estás solo. No puedes ser feliz si no tienes un cuerpo a la moda. No puedes ser feliz si los otros actúan así."

La ley del desapego, de acuerdo al autor espiritual Deepak Chopra, dice que para adquirir cualquier cosa en el universo físico tiene que renunciarse al apego hacia eso, pero no renunciar a tu intención y deseo sino al apego al resultado. El apego está basado en el miedo y la inseguridad; la necesidad de seguridad se basa en el desconocimiento de tu propio ser, de potencialidad pura.

Cuando nos desapegamos, dejamos de aferrarnos a una sola vía, a una sola manera para ser felices, y nos damos cuenta lo absurdo que es obstinarse con un resultado particular, del millón de posibilidades que existen; forzar soluciones sólo crea nuevos problemas. Es reconocer que el apego sólo trae dolor.

El desapego implica entonces soltarse, para caminar más tranquilos, sin querer controlarlo todo y tenerlo todo a "mi manera". No es necesario sentirse fracasado porque algo no se ha conseguido en tiempo o forma propuesto. Por el contrario, es una señal de madurez dejar de forzar. Esto nos permite "fluir", para identificar aquellas puertas que sí están abiertas.

¿Qué hacer para practicar el desapego?
  1. Reconoce que para cada problema o reto existen 10, 20 o 99 soluciones.
  2. Respira y suelta tu necesidad de lograr tu meta por una vía particular; no es necesario probar nada a nadie.
  3. Despeja tu mente, la risa es un gran aliado; ríete de ti y de tu apego.
  4. Invita nuevas posibilidades a tu vida, mantén una actitud abierta, utilizando tu intuición para "olfatear" otras opciones. Practica la creatividad del niño y verás muchas opciones más.
  5. Toma acción.
  6. Repite el paso 1.
El desapego es mantener firme el rumbo y las convicciones, pero reconociendo que la realización personal y profesional se pueden lograr por muchas vías. Es persistir, pero con tranquilidad, abierto a nuevos caminos, situaciones y personas. Es dejar de controlar y comenzar a disfrutar más.

2 comentarios:

  1. Me ha parecido excelente este artículo, ayyyy! si es que casi siempre la causa de preocupaciones es precisamente por eso, por el apego! gracias por este artículo tan necesario para la vida...Saludos!
    Cai Martinez

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